Al comienzo del programa, Verónica contó que conoció a Maradona en la boda de una compañera suya de gimnasio, que se casó con un sobrino lejano del 10. "En el salón, Diego se acercó y se presentó. Me miraba con ojos de conquista, de que le gustaba mucho. Esa noche ni un beso. Tuve una propuesta de irme con él, pero yo no acepté", recordó.
Ya en pareja, Verónica contó que "Diego no se cuidaba a pesar de la operación", en referencia al bypass gástrico. "Tomaba mucho alcohol. Cuando lo conocí estaba con mala gente, con mala junta. Ahora vilvió a estar rodeado de esa mala gente", reveló. "Es gente conocida del ambiente de la noche. Ellos no me querían. Verónica era la que no lo dejaba salir a la noche. Ellos lo llamaban a las 3 de la mañana para escaparse. Le daban alcohol, mujeres", agregó. "Un día recibí un llamado a las 7 de la mañana y me dijeron que vaya al casino flotante porque Diego estaba con un amigote, Alejo Clerici. Hacía negocios con la imagen de Diego. Me enojé muchísimo. Pasé cosas horribles por este muchacho. Vive de la noche, de las mujeres y el entorno", rememoró. "Ese día le sacaron todo lo que tenía en la tarjeta de crédito, el dinero del bolsillo, y cuando llegué estaba a punto de sacarse el crucifijo de oro para dárselo al crupier y seguir jugando. Y me lo llevé", recordó. "Lo internaron en un neuropsiquiátrico por el alcohol. Había de todo: gente que se quería suicidar, drogadictos. Se quedó a cambio de que me quedara con él, y acepté. En todas las internaciones estuve con él", contó. "En la internación en el Güemes fue cuando lo vi peor. Estuvo muy mal por el alcohol. Tomaba mucho. Yo me encerraba en el baño, llamaba a mi familia para llorar y descargarme para estar bien para Diego. Me banqué muchas cosas por él. Por eso no me merezco que me haga esto", lamentó.
Ojeda lamentó que Maradona no tenga mayor contacto con Diego Fernando. "Ahora estamos abandonados los dos. Mi hijo está sin padre. Quiero tener una buena relación con él, pero buen, él se pierde este bombonazo".
Por otro lado, se refirió a Claudia Villafañe y a las hijas del ex futbolista. "No me importa Claudia. Y en este momento, Gianinna y Dalma no me interesan. Son las medias hermanas de mi hijo. Me dijeron negra de mierda, villera de Fiorito. No me lo dijeron personalmente, pero sé que me decían así. Se lo dije mil veces a Diego, pero él contestaba que era su familia y que no podía hacer nada. No me importa lo que digan ahora en los medios o en Twitter. Sólo me importa mi hijo".
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