Siempre hubo rumores, e incluso testigos que den crédito a las relaciones paralelas que mantiene la modelo Claudia Ciardone, novia de Ricardo Fort, con otros hombres.
Según informa en su edición impresa el Diario Crónica, el sábado por la noche, la rubia volvió a su viejo rubro antes de ser “chica Fort”: botinera.
Se la habría visto con el delantero de Independiente, Andrés “Cuqui” Silvera, a los besos.
No es la primera vez que se habla de los engaños de la modelo con su actual pareja, Ricardo Fort.
Lo cierto es que el sábado por la noche, la novia de “Ricky” – dicen – se mostró muy acaramelada con el “Cuqui” Silvera en Terrazas del Este, un local ubicado en Punta Carrasco, Costanera Norte, donde además de brindarse infinitos besos y caricias, compartían buena vista al río del lugar tomados de la mano como una pareja romántica.
El jugador de Independiente (casado y con hijos) sería un “reconocido amante de la noche”, y muchas veces habría tenido problemas en su club por sus salidas y llegadas tarde a entrenamientos.
“¿Claudia Ciardone tendrá estas libertados en su relación con Fort”, se pregunta Crónica.
De la noche a la vida hogareña. Mientras Claudia Ciardone fue vista a los besos con el astro de Independiente, Ricardo se refugia en su casa y ayer por la tarde charló en exclusiva con A24.com, a quienes atendió desde su hogar, a raíz de la noticia confirmada sobre la candidatura de su madre, Marta Fort, para una banca en diputados.
Marta (madre del “chocolatero”) anunció que será candidata a diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires en la lista del partido Compromiso Federal, comandado por Alberto Rodríguez Saá.
En conversación con A24.com, Ricardo se mostró preocupado por el anuncio y reveló que hace poco tiempo recibió el mismo ofrecimiento. “Ningún integrante de la familia está de acuerdo con esta decisión, nunca fuimos una familia política y no me gusta que embauquen a mi madre ni que utilicen su figura para una campaña”, dijo.
“No somos militantes ni activistas de ningún partido político, no lo hicimos nunca en la vida y no nos interesa hacerlo, por eso dije que no cuando me lo ofrecieron”, agregó.
Sobre el cuándo, el cómo y el dónde de esa propuesta, Ricardo relató: “La gente de Rodríguez Saá me llamó y muy amablemente me invitó a cenar. Accedí, incluso les llevé un presente, pero les expliqué que de ningún modo iba a poner mi nombre ni mi cara para una campaña”.

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